martes, 2 de junio de 2015

SEMINARIO INTEGRADO PRIMER SEMESTRE 1- 2015 UNIVERSIDAD SIMÓN BOLÍVAR EXT. CUCUTA


TEORIA DEL CONFLICTO SOCIAL EN COLOMBIA DESDE LA PSICOLOGÍA
Luz Stella Rojas Galvis, Psicóloga con Énfasis en Familia, Egresada de la Universidad de Pamplona, (Pamplona 2.005), Especialista en Orientación Vocacional y Ocupacional, Egresada de la Universidad Francisco de Paula Santander, (Cúcuta, 2.009). Esp. Tecnológica en  Gestión y elaboración de Proyectos SENA  (Bogotá, 2012).

Docente: Crecimiento Intragrupal

Universidad Simón Bolívar
San José de Cúcuta,  2.015

RESUMEN

El artículo analiza el conflicto social en Colombia desde la psicología, “Desde el modelo humanista-existencial se  plantéa, que  todo ser  es un “ser en Relación”, (Martinez, M. 2009) cada uno de nosotros se ha convertido en auténtico “custodio y guardián de su hermano” esto ha aumentado intensamente el poder de hacer bien o mal a los demás. Según el informe del  (PNUD) Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo en el 2014, y el (IDH) Informe de desarrollo Humano, proponen  que frente a  las múltiples crisis actuales las naciones deben centrarse en “el ser humano”, fortalecer sus competencias en resiliencia.

ASBTRAC

The article analyzes the social conflict in Colombia from psychology, "From the humanistic-existential model arises, that every being is a" being in Relationship "(Martinez, M. 2009) each of us has become authentic" custodian and guardian of his brother "this has strongly increased the power to do good or harm to others. According to the report (UNDP) United Nations Development Programme in 2014, and (HDI) Human Development Report, propose to address the multiple crises nations should focus on "human beings", strengthen their competences in resiliency.


Palabras Claves: Conflicto, sociedad,  humanismo, resiliencia, potencial,  logro, capacidades.

EL CONFLICTO SOCIAL EN COLOMBIA DESDE LA PSICOLOGÍA

“Al final lo que importa es dar  testimonio de la mejor y más exclusiva potencialidad humana: el poder que tenemos de transformar la tragedia, la enfermedad y el fracaso en un triunfo personal y en un logro humano”
                                                                         Victor Frankl

        El conflicto es inherente a la condición del ser humano y de sus interacciones en las diferentes etapas  de desarrollo, diferenciándose de la violencia, siendo esta  última una manera de resolver un conflicto.

       El conflicto es edénico, es una forma inevitable de la existencia social e individual, el conflicto no debe ser entendido como una manifestación  intrínsecamente negativa, la distinción entre yo y el otro es la distinción más fundamental: el reconocimiento mutuo de los actores.

       Desde el modelo humanista-existencial se  plantéa, que  todo ser  es un “ser en Relación”, (Martinez, M. 2009) cada uno de nosotros se ha convertido en auténtico “custodio y guardián de su hermano” esto ha aumentado intensamente el poder de hacer bien o mal a los demás.

       Este cambio básico en nuestra sociedad, que hace de todo ser un ser en relación, donde cada entidad humana es constituida por un grupo de relaciones  que tiene con las demás entidades, requiere paralelamente un cambio en la educación, la nueva educación  debe fijar como una prioridad  el sentido de conciencia de la propia responsabilidad, es decir el ser sensible de la  repercusión positiva o negativa  que la conducta individual tendrá en las demás personas. Martínez M. (2009).

       El psicólogo Victor Frankl, propone que el medio ambiente no constituye  todo el hombre,  que más bien  todo depende de lo que el hombre hace de él, de qué actitud toma frente a él, por consiguiente el hombre es mucho más que un producto de la herencia y del medio ambiente. LOGOTERAPIA Y ANÁLISIS EXISTENCIAL (2011).
       La humanidad de hoy en día, si bien ha hecho grandes logros en la ciencia y la tecnología, aún no ha conseguido construir una sociedad humana donde todas las personas vivan en armonía entre ellos. Varias interrogantes nublan la mente humana y crean sentimientos limitantes.   Estos sentimientos, que nos impiden realizar la unidad fundamental que existe entre todos seres, han provocado a lo largo de la historia los diversos conflictos, guerras, y desequilibrios en el mundo.  Es motivo por el cual se originó el enfoque humanista que pretende que el ser humano se comprenda más así mismo encontrándole un sentido de vida a su existencia y generando bienestar en el otro.

       El conflicto social es, para Schutz, la puerta abierta al consenso dado a través del diálogo. Nuevamente, la teoría del conflicto social no conlleva la idea de la transformación social y menos aún es sinónima “de guerra o de guerra civil”

       El conflicto armado en Colombia lleva aproximadamente  43 años en su último periodo. Esta ubicación reconoce el nacimiento de las FARC-EP y del ELN, como un momento clave en la historia del conflicto en el año 1964. Un conflicto de tan larga duración que ha sido catalogado como uno de los más antiguos del planeta.  Para los colombianos, la violencia siempre ha existido, no ha habido nunca propiamente tiempos de paz, de tal suerte que todas las violencias de todos los tiempos parecen ser una y la misma.
       Pécaut (2001) al respecto señala: “La memoria de la violencia sigue siendo, en efecto, singularmente fuerte. Una memoria compleja, como lo ha sido La Violencia misma. Esta memoria no es extraña en la reiniciación de la violencia a fines de los años setenta. Ella ha forzado el imaginario social que incita a pensar que las relaciones sociales y políticas son regidas constantemente por la violencia, y que esta puede invadir de nuevo toda la escena”.

       Qué tipo de sociedad somos habiendo crecido y creído que la violencia no constituye y es parte de nuestra realidad?

       El colombiano naturaliza su escena, se comporta y transita por su vida lidiando con la existencia de la violencia y sólo en breves instantes se libra de lo que llamaría Martín Baró (2001) el fatalismo.
       Según esta realidad desde la psicología           humanista, se  hace necesario  hablar  del  desarrollo  de  las  habilidades  y  las  potencialidades humanas, este concepto se fundamenta actualmente dentro del ámbito de la salud, estamos hablando de la calidad de vida (Ardila, 2003).
       Según el informe del  (PNUD) Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo en el 2014, y el (IDH) Informe de desarrollo Humano, proponen  que frente a  las múltiples crisis actuales las naciones deben centrarse en “el ser humano”, fortalecer sus competencias en resiliencia.

       El conflicto y la sensación de inseguridad personal tienen impactos  adversos en el desarrollo humano y dejan a miles de millones de personas viviendo en condiciones precarias. Muchos países en el lugar más bajo del índice de desarrollo humano, están saliendo de grandes períodos de conflicto  o aún enfrentan violencia armada.  Más de 1.500 millones de personas viven en  países afectados por conflictos, alrededor de una quinta parte de la población mundial,   y la reciente inestabilidad política ha tenido un enorme costo.

       En el panorama nefasto de nuestro conflicto interno, los niños, niñas y adolescentes, han sido una de las poblaciones más vulneradas, y al afirmar esto, no me refiero sólo a la cantidad que ha sido afectada, o a la diversidad de formas en que ha sido vulnerada, sino a las graves consecuencias y efectos que puede tener para un ser humano, el vivir, tan temprano en su existencia realidades tan severas y degradantes.
       Esta situación de las niñas y de las mujeres en el conflicto es muy angustiosa porque las denuncias son más invisibles o algunas veces no se producen. Las connotaciones sexuales advierten daños profundos psicológicos y físicos y en última instancia se está hablando de que el cuerpo femenino se convierte en un arma y un territorio de guerra hasta donde se extiende el conflicto con toda su fuerza y degradación, en todo el sentido de la frase.
       Es sabido, y así lo recuerda Bauman (2004) que en los lugares donde hay violencia permanente se genera agresividad en las personas que va de lo público a lo privado, el vecindario, la familia ya no son los espacios de solidaridad y cooperación.

       Las personas no pueden aprender porque sus entornos se vuelven impredecibles y el hecho de conformar hábitos, o de hacer memoria puede convertirse en un acto suicida. Se necesita empezar siempre de nuevo, pensar que cada circunstancia es única a fin de tener la flexibilidad para sobrevivir, aun si está práctica desgarra y fragmenta la conexión con el pasado o con otros seres humanos.

       El Conflicto colombiano ha generado graves problemas sociales, psicológicos, económicos, políticos y culturales, siendo estos desafíos para los responsables políticos y las comunidades afectadas.

       De acuerdo a esta realidad se propone enfrentar las vulnerabilidades generadas por el conflicto  y fomentar la resiliencia.
“El concepto de Resiliencia ha acabado con la dictadura del  concepto de vulnerabilidad”   S. Tomkiewicz.
       Se ha definido la resiliencia como la capacidad de una adaptación exitosa, funcional, positiva o competente a pesar de un alto grado de riesgo biológico o psicosocial, o de estrés crónico, o después de un severo o prolongado trauma. (Egeland, Carlson y Sioufe, citados en Contreras) (2007)

       El concepto de resiliencia ha cobrado importancia en los últimos años, al estudiarse casos de niños, jóvenes y adultos que han pasado por situaciones probleticas, las cuales, pueden llevar a muchos a desviarse de su propio bienestar y terminar con su vida o refugiarse en las drogas y el alcohol, y sin embargo han logrado salir adelante, por encima de todo ello han logrado ser personas igual a cualquier otro semejante que no hubiese sufrido o pasado lo que él o ella si tuvo que vivir (Henderson, 2005). La resiliencia se empieza a estudiar por Anthony, quien observa que algunos niños(as) criados en ambientes insanos, con madres psicóticas, logran escapar de esos peligros(Anthony, 1983, citado en Contreras) (2007).

       Así mismo, Henderson (2005) detalla ocho enfoques y descubrimientos a partir del concepto de resiliencia, que definen lo que está sucediendo hoy en el área del estudio de esta importante característica humana, estos enfoques nos servirán para comprender mejor a qnos referimos con resiliencia y cles son sus características más importantes:

1. La resiliencia está ligada al desarrollo y el crecimiento humano.
2. Promover factores de resiliencia y tener conductas resilientes requieren diferentes estrategias.
3. El nivel socioeconómico y la resiliencia no están relacionados.

4. La resiliencia es diferente de los factores de riesgo y los factores de protección.
5. La resiliencia puede ser medida, además es parte de la salud mental y la calidad de vida.
6. Las diferencias culturales disminuyen cuando los adultos son capaces de valorar ideas nuevas y efectivas para el desarrollo humano.
7. Prevención y promoción son algunos de los conceptos en relación con la resiliencia.
8. La resiliencia es un proceso: hay factores de resiliencia, comportamientos resilientes y resultados resilientes.

Al consolidar la resiliencia familiar, fortalecemos a la familia como unidad funcional y posibilitamos que inculque esa capacidad en todos sus miembros.
La resiliencia se ha caracterizado como un conjunto de procesos sociales e intrapsíquicos que posibilitan tener una vida sana viviendo en un medio conflictivo.
La resiliencia habla de una combinación de factores que permiten a un niño, niña o un ser humano, afrontar y superar los problemas y adversidades de la vida.
Las características del sujeto resiliente:
1.     Habilidad
2.     Adaptabilidad
3.     Baja susceptibilidad
4.     Enfrentamiento efectivo
5.     Capacidad
6.     Resistencia a la destrucción
7.     Conductas vitales positivas
8.     Temperamento especial
9.     Habilidades cognitivas, desplegadas frente a las situaciones vitales adversas, conflictivas, estresantes, que les permite solucionarlas y superarlas

“EL PROGRESO HUMANO NO ES NI AUTOMATICO, NI INEVITABLE”
                                                                            MARTIN LUTHER KING




















Referencias

NAVARRO, F. (2013) REVISTA POIESIS, UNA MIRADA  DESDE LA PSICOLOGÍA HUMANISTA EXISTENCIAL A LAS CIRCUSNTANCIAS PSICOSOCIALES EN COLOMBIA. COLOMBIA 2013.
LUTHER M. (2014) INFORME SOBRE DESARROLLO HUMANO, SOSTENER EL PROGRESO HUMANO, REDUCIR VULNERABILIDADES Y CONSTRUIR RESILIENCIA. 2014
PARRA, A. M. (2008) INVESTIGACIÓN  INTERVENCIÓN EN EL AREA DEL CONFLICTO ARMADO.
BARO, I. M. (2000) VIOLENCIA SOCIOPOLITICA UNA VISIÓN  PSICOSOCIAL.
MARTINEZ, M. (2009) LA PSICOLOGIA HUMANISTA, UN NUEVO PARADIGMA  PSICOLÓGICO. TRILLAS.
VICTOR F. (2011) LOGOTERAPIA Y ANALISIS EXISTENCIAL. HERDER.
ALPIZAR, Y, SALAS D.  (2010) EL PAPEL DE LAS EMOCIONES POSITIVAS EN EL DESARROLLO DE LA PSICOLOGIA POSITIVA.




TEORIA DEL CONFLICTO SOCIAL EN COLOMBIA A LA LUZ DE LA TEORIA CONSTITUCIONAL










NEYLA YADIRA LOPEZ CONTRERAS
60.384.831









UNIVERSIDAD SIMON BOLIVAR
SEDE CUCUTA
2015

TEORIA DEL CONFLICTO SOCIAL EN COLOMBIA A LA LUZ DE LA TEORIA CONSTITUCIONAL

NEYLA YADIRA LOPEZ CONTRERAS
Resumen

Mediante este artículo pretendo realizar una breve exposición sobre algunas de las causas que han determinado el conflicto social que ha padecido nuestro país desde la época de su independencia de España, hasta la actualidad, abordándose el análisis desde tres períodos, el primero, a partir de la independencia hasta antes de la expedición de la Constitución de 1886; el segundo, que abarca la aprobación de la antes mencionada Constitución hasta la producción de los fenómenos sociales que generaron la aprobación de la Constitución de 1991 y; el tercero que comprende la promulgación de la Constitución de 1991 hasta la fecha.

Palabras claves

Estructura social, gobernantes, ordenamiento jurídico, sociedad, constituciones, propiedad privada, ciudadanía, estado de derecho, estado social constitucional de derecho, antropocentrista, dignidad humana.

Abstract

Through this article we make a laconic statement of the main causes that have influenced the social conflict that has beset our country since the time of its independence from Spain to our present time, addressing for three periods, the first beginning with our independence to before the issuance of the 1886 Constitution; a second period, covering the issuance of the aforementioned Constitution to social phenomena that generated the creation of the Constitution of 1991; a third period comprising the issuance of the 1991 Constitution to date.
Keywords

Social structure, rulers, law, society, constitutions, private property, citizenship, rule of law, social state constitutional law, anthropocentric, human dignity.

INTRODUCCIÓN:

El conflicto social en Colombia ha estado marcado por diversos factores, entre otros, económicos y culturales, pero además de ello, debe reconocerse, por aspectos normativos constitucionales y de administración de justicia, los que desafortunadamente, antes que convertirse en instrumentos para la materialización de los derechos de los asociados, han estado alejados del respeto a dichas garantías, situación que si bien es cierto ha mejorado considerablemente con ocasión de la implementación del Estado Social de Derecho determinado en la Constitución Política de 1991, se encuentra lejos de las condiciones que representa un verdadero Estado organizado bajo dicha modalidad, lo que impide superar dicho conflicto. 

CONFLICTO SOCIAL EN COLOMBIA

Colombia desde tiempos inmemorables se ha visto afectada por diferentes conflictos sociales, los cuales han sido la reacción del pueblo a la acción de los gobernantes de turno, quienes se han dedicado a incrementar sus arcas, dejando de lado el verdadero objetivo del Estado, esto es, el bienestar de todos y cada uno de sus ciudadanos. A más de 200 años de su independencia vemos que Colombia sigue sumergida en conflictos sociales, que obstaculizan la posibilidad de concretar a cabalidad el Estado Social de Derecho reconocido en la Constitución Política de 1991.

Me propongo entonces realizar un recorrido por la historia de nuestro país con el objetivo de analizar algunas de las causas que originaron el conflicto social en Colombia, lo que nos llevará a comprender por qué éste se mantiene hasta nuestro tiempo, no obstante la evolución que ha sufrido nuestro ordenamiento constitucional.   

I. DE LA INDEPENDENCIA DE COLOMBIA HASTA ANTES DE LA EXPEDICION DE LA CONSTITUCION DE 1886

No obstante haberse llevado a cabo el proceso de independencia de Colombia en 1819 debe reconocerse que la estructura social, económica y jurídica heredada de los españoles siguió su curso y fue sólo hacia mediados del siglo XIX que los gobernantes del momento, influenciados por los teóricos de la ilustración, implementaron el contractualismo, cuidándose de aprobar ordenamientos jurídicos que favorecían determinados sectores de la sociedad.

En este punto, importancia destacada tuvo la expedición del código civil cuyo fundamento, como lo ha manifestado el investigador JORGE CARVAJAL, fue la apropiación privada de la tierra, el que con las normas legales aprobadas sobre adjudicación de baldíos, convirtieron al derecho en un instrumento al servicio de quienes conocían y podían reclamar las normas[1]

El reconocido tratadista FERDINAND LASSALLE al ocuparse de responder al interrogante de qué es una Constitución sostiene que no es otra cosa que la decisión de los factores reales de poder[2]. Tal planteamiento se evidencia en las primeras constituciones de Colombia, destacándose en la de 1821 su carácter eminentemente excluyente, con la implementación del voto censitario, en contraposición al sufragio universal, determinando para ser sufragante ser dueño de propiedad raíz, condición que así mismo se exigía para poder ser elegido.  Posteriormente tal situación se replica en la Constitución de 1830 con mayor énfasis, al establecer como presupuesto de la ciudadanía tener dicha condición, exigiendo para ser senador ser propietario de bien avaluado en $8.000 y para Representante en $4.000.

Con la expedición de la Constitución de la Nueva Granada se modifica tal situación al exigirse para elegir el ser casado, mayor de 25 años y saber leer y escribir, ratificándose la condición de ser propietario para ser elegido, tales requisitos sin duda alguna se constituyeron en barrera para el acceso al poder de los diferentes sectores de la sociedad, propiciando obviamente descontento popular.  La Constitución de 1843 mantiene dichos principios, pudiéndose afirmar que durante esta época el Gobierno estuvo en manos, única y exclusivamente de propietarios y letrados, excluyéndose al resto de la población.

En 1853, en lo que para la época constituyó avance, se elimina el requisito concerniente a la propiedad y a las letras como presupuesto de la ciudadanía, eso sí, proclamándose la inviolabilidad de la propiedad privada, así mismo, se puso fin a la esclavitud. 

En la Constitución de 1858 se desarrollan los derechos de expresión, movilización, protección a la propiedad privada, trabajo, libertad de credo y de asociación.  Más adelante en la de 1863 se profundiza el ideario liberal de carácter federativo, dejándose de invocar a Dios como protector y legislador del universo para promulgarse ésta en nombre y por autorización del pueblo, desarrollándose un amplio catálogo de derechos individuales; no obstante dichas pretensiones, la justicia no se materializó por la falta de garantías que permitieran el reconocimiento de tales derechos, además de evidenciarse una igualdad formal, todo jalonado por los detentadores del poder, especialmente, la clase conservadora apoyada por la Iglesia que se opusieron frontalmente a dicho modelo, lo que propicio confrontación armada, reflejada en diferentes guerras civiles, desarrolladas hacía la segunda mitad del siglo XIX.

Corolario de dicha situación se aprueba la Constitución de 1886 que puso fin al estado liberal federativo y un evidente retroceso en materia de libertades civiles y políticas.

II. DE LA CONSTITUCION DE 1886 HASTA ANTES DE LA EXPEDICION DE LA CONSTITUCION DE 1991

La Constitución de 1886 establece un Estado de derecho en el que los poderes públicos quedaron sometidos al imperio de la ley entendida en sentido formal, consolidando un estado conservador, donde en el ejercicio del poder tuvo importante injerencia la vinculación de la Iglesia Católica, impidiéndose, como lo afirma el tratadista MANUEL FERNANDO QUINCHE RAMIREZ el desarrollo de una sociedad laica, al establecerse desde el mismo preámbulo que Dios y no el pueblo era el fundamento del poder.[3]

Se puede afirmar que durante la Constitución de 1886 se vivió un período de una enorme crisis institucional, por la confrontación permanente de la oligarquía que se disputaba el ejercicio del poder, no obstante haber sido aprobada como un pacto de paz y de justicia para superar la crisis existente tiempo atrás. 

Cierto es que en el texto de dicho ordenamiento se hacía referencia a los derechos a la libertad y a la propiedad, como a la vida, honra y bienes, destacándose lo atinente al principio de responsabilidad, legalidad y erigiéndose como único derecho social el de la educación, pero nada se dijo en lo referente a mecanismos para la protección de los derechos.

Se destaca en dicho cuerpo constitucional, la desdibujación del sistema de Gobierno Presidencial, estableciéndose lo que se ha denominado por un sector de la doctrina, como el presidencialismo, debido a la excesiva concentración de poder en manos del Presidente de la República, el que se constituyó en el eje de toda la actividad estatal, al punto de asignársele el ejercicio de funciones legislativas, como la posibilidad de determinar las maneras de realizar el control en un panorama en el que, como lo refiere el autor anteriormente mencionado, no podría encontrarse una actividad que no fuere de su dominio total o parcial.  Resalta en esta situación, el hecho de que en ejercicio de las atribuciones conferidas en el artículo 121 de la Constitución buena parte del período de vigencia de ésta estuvo signado por el estado de sitio, donde el legislador ordinario pasó a un segundo plano, concentrándose dicho poder hegemónico en el Presidente de la República.

VICTOR BLANCO sostiene que la regulación jurídica no sólo es formalidad, generalidad y abstracción, pues cada una de sus normas tiene un contenido y un sentido determinables con mayor o menor dificultad según el caso, que son una propuesta del deber ser y en esa  medida una propuesta de orden valorativo, sin embargo, el desarrollo o la aplicación de las disposiciones constitucionales en comento, se orientó a garantizar los intereses de sectores privilegiados de la sociedad, en detrimento de las clases desfavorecidas.[4]

Se radicaliza en esta Constitución la creación de una sociedad estamental, establecida a partir de criterios de prestigio, propiedad y conocimiento, situación que necesariamente conllevó a importantes luchas sociales para la conquista de sus derechos, pudiéndose advertir lo referente a las huelgas desarrolladas en los primeros años del siglo XX.

Igualmente, se evidencia en este período un profundo conflicto social en la parte agraria debido a las reclamaciones de sectores campesinos e indígenas que buscaban la titularización de tierras y el fin del sistema de explotación por terratenientes.

No se puede soslayar, que a partir de la revolución Mexicana, la aprobación de la Constitución de Weimar y la Española, se jalonó una reforma hacía el año de 1936, que procuraba sentar las bases del Estado Social de Derecho, con lo que ello implicaba, al punto de que se llevaron a cabo importantes reformas, destacándose lo concerniente a la función social de la propiedad, a la intervención del Estado en asuntos económicos, el derecho a la huelga, a la garantía de educación básica por parte del Estado, asistencia pública en salud, fijándose deberes sociales para el Estado y los particulares; sin embargo, ello conllevó a la violencia generada en los años 30 a 50, ligada a conflictos entre el sector campesino en la búsqueda por obtener títulos de tierras, enfrentamientos entre los liberales y conservadores, como entre obreros y sectores de la clase media, crisis que llevó en el año de 1953 a que los partidos antes referidos buscaran una alternativa para poner fin al conflicto, lo que propició la toma del Gobierno por parte de las Fuerzas Armadas en cabeza del General Rojas Pinilla, y posteriormente el establecimiento en el año de 1957 del Frente Nacional, producto del cual se decidió la alternación en el poder del partido liberal y conservador en la Presidencia por un período de 16 años, determinándose la paridad política que otorgaba igual representación en las Corporaciones Públicas y en la Rama Judicial; hecho que innegablemente impidió la posibilidad del acceso al poder de otras corrientes políticas, lo que sirvió de caldo de cultivo para la organización de la lucha armada, flagelo del que todavía padece nuestro país.

En la parte judicial, debido a ésta composición, el ejercicio se caracterizó por una visión eminentemente positivista, donde los funcionarios dejaban de lado la garantía de justicia. Resulta interesante en este punto traer a colación la visión de la Corte Suprema de Justicia, al analizar la constitucionalidad de los Decretos Legislativos expedidos bajo el amparo del estado de sitio, la que circunscribió a un análisis eminentemente formal, lo que propició que prácticamente ninguno de ellos fuera declarado inexequible.  De destacar también resulta la forma en que se dibujó la configuración del aparato judicial al establecerse la cooptación, lo que como acertadamente lo señala RODRIGO UPRIMNY, dio origen a clientelismo dentro de la Rama, al ser los mismos Magistrados quienes escogían a sus sucesores y a los Magistrados de los Tribunales y estos últimos a su vez designaban a las jueces, vía por la que se cercenó el ingreso de juristas con un tipo de interpretación jurídica diferente a la dominante.[5] 

Todo esto, obviamente fue detonante para el conflicto social caracterizado por la violencia que finalmente condujo al movimiento salvemos a Colombia que facilitó la convocatoria para una Asamblea Constituyente, que abrió las puertas a un nuevo texto constitucional.

Si Colombia había vivido una crisis de violencia en los años 50, nada puede compararse con la que se inició en los años 80, donde los índices de violencia escalaron significativamente, pasándose de registrarse más de cien muertes (años 50) a más de cuatro mil (años 80), ello por cuanto, el conflicto ya no era entre partidos políticos, sino que se trataba de un conflicto armado del que hacían parte diferentes guerrillas comunistas, narcotraficantes, latifundistas y militares en retiro que integraron los grupo paramilitares; siendo las únicas víctimas inocentes la población civil.

Es así como en agosto de 1989, a una semana del asesinato del candidato presidencial LUIS CARLOS GALÁN, los estudiantes marcharon por las calles del centro de Bogotá para rechazar la violencia terrorista, con el lema "Por todo lo que nos une y contra todo lo que nos separa". Así, organizados en el movimiento Todavía podemos salvar a Colombia, estudiantes de derecho de prestigiosas universidades de la capital lograron que en las elecciones parlamentarias del 11 de marzo de 1990 se incluyera una papeleta en la que los electores pudieran responder sí o no a la convocatoria de una asamblea para reformar la Constitución Política.

Fueron más de dos millones de votos a favor, lo que llevó a que el presidente VIRGILIO BARCO, mediante Decreto Ley N° 927 del 3 de mayo de 1990, ordenara a la Registradora contabilizar los votos que en las siguientes elecciones presidenciales del 27 de mayo se emitieran a favor de la convocatoria.  A su turno, la Corte Suprema en un fallo histórico, reconociendo la voluntad del constituyente primario, declaró exequible el decreto, y la papeleta obtuvo respuesta afirmativa de cinco de los seis millones de ciudadanos que se acercaron a las urnas. Días más tarde el presidente de la época CÉSAR GAVIRIA, días después de su posesión presidencial, firmó el Decreto N° 1926 del 24 de agosto de 1990 convocando a elecciones para la Asamblea Constituyente el 9 de diciembre siguiente, el que revisado por la Corte Suprema de Justicia el 10 de octubre siguiente, fue declarado exequible, eliminando toda restricción de los temas que podría tocar la Constituyente, salvo los tratados internacionales y el período de quienes habían sido elegidos en 1990.

Es así como mediante un proceso democrático el pueblo eligió a los 70 delegados de la Asamblea Nacional Constituyente, generándose una composición política excepcional, pues a pesar de ser Colombia un país bipartidista, este cuerpo colegiado estuvo integrado por integrantes del Partido Liberal, el Partido Social  Conservador, el Movimiento de Salvación Nacional y la Alianza Democrática M19, más cuatro exguerrilleros (dos con voz y voto).

Al final de todo este proceso se aprobó una Carta Política compuesta por 380 artículos definitivos y 60 transitorios, producto de transacciones, acuerdos, negociaciones; lo que, tal como se mencionara al inicio, es el resultado de la crisis que atravesaba nuestro país.

III. DE LA CONSTITUCION DE 1991 A LA FECHA

Resulta innegable que la Constitución Política de 1991 partió la historia del constitucionalismo colombiano al sentar las bases para la implementación de un Estado Social Constitucional de derecho, antropocentrista, colocando especial énfasis en el concepto de la dignidad humana, entendida en términos Kantianos, donde el ser humano deja de ser considerado un medio para lograr fines estatales, constituyéndose en un fin en sí mismo, situación que impone al Estado fijar políticas de carácter incluyente, que permitan al individuo satisfacer sus necesidades básicas, en materia de salud, educación, vivienda, saneamiento básico, entre otros.

Dicha Constitución, debe afirmarse, quizás la única de carácter democrático, innegablemente constituye avance en materia de derechos y garantías, facilitando el acceso a la administración de justicia.  Dicho texto no se limita a consagrar un amplio catálogo de derechos constitucionales, fundamentales, económicos sociales y culturales, como colectivos, sino que además ofrece mecanismos al alcance de las personas para hacerlos efectivos, así se consagra un importante pletórico agregado de herramientas que contribuyen a dicho fin, entre las que se encuentran el hábeas corpus, la tutela, la acción de cumplimiento, populares, de grupo, el control de constitucionalidad por la Corte Constitucional y por el Consejo de Estado, lo que ha facilitado el acercamiento del individuo a la administración de justicia para resolver sus problemáticas, ejemplo a destacar lo constituye la acción de tutela como mecanismo de garantía para la protección del derecho fundamental a la salud.

Igualmente la Carta en comento, por primera vez constitucionaliza el tema de la responsabilidad al consagrar en el artículo 90 la responsabilidad del Estado cuando por acción u omisión de las autoridades, cause daño antijurídico a una persona, es decir, en eventos de ruptura del principio de igualdad frente a las cargas públicas, lo que implica que el Estado responde por conductas activas, omisivas, lícitas e ilícitas, toda vez que el análisis no se centra en determinar si el Estado obró con culpa, si no en el hecho de establecer si se está frente a un daño antijurídico.

A su vez dicho Ordenamiento  establece el principio democrático, lo que conlleva el de participación, ofreciendo mecanismos al efecto, además del voto, la iniciativa legislativa, el referendo, el plebiscito, la consulta popular, la revocatoria del mandato, el cabildo abierto, las veedurías ciudadanas. También el principio del pluralismo, a fin de afianzar el respeto por las diferencias.

Igualmente propicia el principio de separación de poderes, aspecto frente al cual debe afirmarse el constituyente fue tímido en romper con el principio de tridivisión de poderes, eso sí, reconociendo la existencia, además de las tres funciones clásicas del Estado, de otras igual de importantes, asignándolas a Órganos independientes, tales como la de control, electoral, de banca central, entre otras.

Es importante el avance en materia constitucional, al consagrarse mecanismos que facilitan la toma de decisiones que permitan superar la problemática del conflicto social; sin embargo, para llevar a la todo lo anterior se necesita voluntad política y conciencia para ello, pero para adquirir ésta, es imprescindible la educación, de la cual un importante porcentaje de la población carece por falta de oportunidades, pero además lo que resulta mucho más preocupante, por el desinterés e indiferencia en tomar decisiones en aspectos que nos afectan, situación que impide poner fin al conflicto social 

Por otra parte el texto original de la Constitución viene siendo objeto de reformas coyunturales en beneficio de sectores determinados. Fíjese que a raíz de los problemas de corrupción que afectan ciertos sectores de la cúpula judicial por parte del Gobierno, el Legislativo y el Judicial se invita a una cruzada para salvar la Justicia, procurándose mayor poder en el Ejecutivo para el manejo de lo Judicial, cuando antes que reformas se requiere solo voluntad del Presidente y de las Cortes, como del Congreso, de postular y elegir a juristas, libres de censura, que cuenten con las calidades y valores para ocupar dichas dignidades.

Podemos concluir entonces, que a pesar de todas las reformas constitucionales dadas en nuestro país, Colombia continúa en un constante conflicto social, que ha pasado por diferentes etapas, que han estado impulsadas por diferentes fenómenos, pero que al final todos persiguen lo mismo: el bienestar de los ciudadanos; la búsqueda constante de un ideal de Estado, donde no sólo se quede plasmado en la Constitución la idea de un Estado Social de Derecho, sino que éste se lleve a la práctica, un Estado donde todos sus habitantes vivan en condiciones dignas, que cuenten con todos los servicios básicos proveídos por el Estado, así como vivienda, educación, alimentación, etc.

Varios interrogantes nos surgen al respecto; ¿Cómo podemos contribuir como ciudadanos para que se puede lograr este ideal de Estado?, ¿Cuál sería la solución para acabar con esta crisis?; ¿Quiénes son los verdaderos responsables de ella?, son cientos los interrogantes que nos surgen y miles las posibles soluciones, lo cierto es que lograr un estado ideal no es sólo trabajo de quienes llevan las riendas de este país (Gobierno, Congreso, Rama Judicial), sino de todos y cada uno de nosotros, sólo un pueblo educado, con ideales, puede lograr un cambio radical, cuando los ideales que nos guíen sean los de bienestar general y no el fruto de beneficios individuales.
BIBLIOGRAFIA

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BLANCO, Victor. Los límites de la Justicia, consultado en file:///C:/Users/J3ADMIN-1/Downloads/los-lmites-de-la-justicia-0.pdf, hoy 17 de abril de 2015.  

UPRIMNY Yepes, RodrigoLos límites de la Justicia, consultado en file:///C:/Users/J3ADMIN-1/Downloads/los-lmites-de-la-justicia-0.pdf, hoy 17 de abril de 2015.


[1] La justicia, el derecho y el conflicto social en Colombia. El otro derecho, número 28,. Julio de 2002. ILSA, Bogotá D.C. Consultado en http://ilsa.org.co:81/biblioteca/dwnlds/od/elotrdr028/elotrdr028-08.pdf , hoy 17 de abril de 2015.
[2] ¿Qué es una Constitución? Editorial Panamericana. Décima reimpresión. Bogotá 2014. Pág. 7 a 15.
[3] Derecho Constitucional Colombiano. De la Carta de 1991 y sus reformas. Quinta edición Editorial Temis. Bogotá 2012. Pág 7 a 12.
[4] Los límites de la Justicia, consultado en file:///C:/Users/J3ADMIN-1/Downloads/los-lmites-de-la-justicia-0.pdf, hoy 17 de abril de 2015.
[5] Los límites de la Justicia, consultado en file:///C:/Users/J3ADMIN-1/Downloads/los-lmites-de-la-justicia-0.pdf, hoy 17 de abril de 2015.

EL CONFLICTO EN LA HISTORIA DE LA HUMANIDAD

El conflicto es un fenómeno natural que ha acompañado al ser humano en la lucha por su supervivencia y  en el   desarrollo de las primeras comunidades.
Desde el punto de vista antropológico, algunos estudios sostienen que la guerra fue una práctica muy común entre los cazadores y recolectores  durante el Paleolítico. Lo más probable es que la guerra en este periodo se diera a pequeña escala y de forma esporádica entre estos grupos. El arco parece haber sido el arma más importante y utilizada porque representaba menos riesgos para la vida del atacante, comparado con un enfrentamiento directo, cuerpo a cuerpo con su contrincante. Posteriormente, durante el Neolítico aumentó la intensidad de guerra entre las culturas agrícolas en aldeas,  debido a la aparición de la vida sedentaria. Una muestra de la existencia de guerra en este periodo es la presencia de atalayas y muros de fortificación en  algunas ciudades neolíticas de Oriente Medio.
Teniendo en cuenta lo anterior, se puede deducir que la guerra es tan antigua como la formación de las sociedades y que los conflictos han acompañado al ser humano en el proceso de evolución y adaptación social. Durante este lapso, el ser humano se ha organizado de diferentes maneras para enfrentar estos conflictos, generalmente, con una concepción bélica. Fueron en el mundo antiguo muy conocidos los ejércitos de los asirios y los persas, así como los de los griegos que crearon una infantería que precedería la formación de la legión Romana, que contaba con diversos servicios y especialidades combativas. Pero, fue precisamente en la cuna de la civilización Romana, donde se imprimió un nuevo matiz al conflicto, el del componente jurídico, que ha sido el legado más importante de esta civilización al mundo contemporáneo.
En roma, el conflicto surge por el deseo de los plebeyos, que eran la clase sometida, de lograr una igualdad política respecto a los patricios, que eran los ciudadanos, miembros de la aristocracia, quienes manejaban los aspectos políticos desempeñando  los cargos públicos (magistraturas), controlaban y establecían el cobro de impuestos,  determinaban los productos, las rutas y puertos con los cuales se iba a comercializar, entre otros aspectos propios de la administración del Estado. Esto generó en los plebeyos un resentimiento no sólo por el apartamiento de su vinculación en el manejo del Estado, sino  por el empobrecimiento de esta clase debido a sus excesivas obligaciones fiscales, especialmente para financiar la guerra, lo cual les impedía explotar continuamente sus fundos y les hacía endeudarse. Fue esta situación lo que conllevó  a que los plebeyos  salieran de Roma en el año 494 a.C y se instalaran en el Monte Sacro (Montem Sacrum), creando un estado paralelo, controlado por sus propias asambleas (concilia plebis) y con sus propios representantes (tribunos). Esto generó tensión entre los patricios quienes prefirieron mantener una alianza con los plebeyos, (pues eran mayoría  y constituían una fuente de mano de obra productiva) antes que un enfrentamiento. En virtud de lo anterior, se promulga la Ley de las XII Tablas (450 a. C.), para reivindicar los derechos de los plebeyos y equiparlos a los de los patricios; sin embargo, la igualdad no se daría de manera inmediata ni absoluta entre estas dos clases sociales, pues siempre se mantuvieron las diferencias entre ellas, así como la figura del nexum, en la cual el deudor pagaba su crédito con su propia persona, en otras palabras, el acreedor disponía del deudor como persona para asegurar el pago de su deuda cuando su patrimonio era insuficiente. De esta manera, esta  legislación llegó a ser conocida como “tabulae inicua” (tabla de las injusticias).
 No obstante,  la lucha de los plebeyos se mantuvo  y es así como logran importantes derechos:    algunos cónsules fueron reemplazados por tribunos militares con poder consular. La Lex Canuleia, (445 a.c), que permitió el matrimonio entre patricios y plebeyos   . En el 367 a. C., las Leges Liciniae-Sextiae permiten que uno de los dos cónsules sea plebeyo y que esta clase pueda organizar los juegos del coliseo. Se crean nuevas magistraturas, la pretura y la edilidad curul. Los cargos de censor en el 351 a. C., de pretor y de dictador se abren a los plebeyos. El nexum es abolido por la Lex Poetelia Papiria en 326 a. C. En el 367 a. C., los hijos de esclavos liberados pueden acceder al Senado. En el año 300 a.C se promulga la  Lex Ogulnia que permitía a los plebeyos ejercer poderes religiosos; y finalmente se expide  la Lex Hortensia en el 287 a. C., que daba igual peso a la legislación, fuera promulgada por el Senado o por la asamblea de la plebe. Esto en cierto modo, produjo una percepción de equilibrio entre estas dos clases sociales, sin embargo, la jerarquización se mantuvo, y los bárbaros y los esclavos no se consideraban personas en el ámbito del derecho civil, por lo que no eran sujetos de derechos ni de contraer obligaciones, continuaron siendo las clases sometidas a la voluntad de otro (amo o señor).
Pasando a otro espacio en cuanto al desarrollo del conflicto y siguiendo el orden cronológico, durante  la Edad Media no hubo propiamente ejércitos, sino grupos de caballeros al servicio de un rey o un señor, y además disponían de un armamento muy pesado y con poca movilidad. Los cuales tuvieron como ideología la expansión del cristianismo a través de las cruzadas.
A partir del Siglo XIX la guerra tiene dos componentes: uno económico que le permite al país rico  no sólo  el financiamiento de ésta, sino la compra de material bélico más “avanzado” para someter a las poblaciones más débiles y pobres; y el otro,  los efectos sociales de la guerra que repercutieron directamente en la sociedad civil: masacres, hambre, epidemias, pobreza.
Paulatinamente, los estados comprendieron la necesidad de incorporar de manera permanente un ejército, no sólo para defenderse ante un ataque, sino para apoyar la política de expansión y sometimiento hacia otros estados. De esta manera se estableció el servicio militar con carácter obligatorio, para proteger y mantener el orden en la nación.
En el siglo XX  las guerras han tenido un trasfondo económico por el deseo incontrolable de expansión de las naciones que acumulan y manejan la riqueza no sólo de su Estado, sino que se han apropiado de las de otros, a tal punto que se consideran imperios, que bajo el sistema económico del capitalismo, han extendido su poder logrando monopolizar el mercado, manteniendo su hegemonía sobre las demás naciones. Igualmente, la noción geográfica es un elemento fundamental, pues las naciones ahora sometidas o subdesarrolladas, mal llamadas tercermundistas territorialmente se encuentran vinculadas y se pueden reconocer dentro de un mismo espacio.
En el siglo XXI la guerra mantiene la concepción económica y la división geográfica mencionada, pero se imprime un nuevo elemento y es el intelectual, evidenciado en el diseño de software que permite acceder a información privada de diferentes instituciones estatales a nivel mundial.

El conflicto en Colombia.
El conflicto político en Colombia se remonta al siglo XIX cuando comienzan a darse las rivalidades entre los partidos tradicionales que se hizo mas fuerte durante la Guerra de los Mil días e inicio un largo periodo de violencia en Colombia. En cuanto al conflicto político actual, empieza en la década de los 60 con la aparición de las guerrillas (principalmente las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia y el Ejército de Liberación Nacional), fruto de la exclusión social y política, la distribución desigual de las tierras, y la injusticia social. En Colombia existen aproximadamente alrededor de unos 140 grupos de los cuales la mayoría están siendo financiados por el narcotráfico.
Entre 1948 y 1965 hubo una guerra tan sangrienta que este periodo se conoce como la "época de la violencia". En el año 1958, el poder se distribuyó entre los dos poderosos partidos tradicionales y los demás grupos de presión no pudieron participar en los procesos políticos. Eso tuvo como consecuencia que, a mediados de los años sesenta, se formaran las dos guerrillas de izquierda más importantes hasta hoy: Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el Ejército de Liberación Nacional (ELN). Estas dos guerrillas juntas controlan hoy día aproximadamente, con sus más de quince mil guerrilleros, la mitad de la superficie de Colombia.
Esta oposición armada se enfrenta al ejército regular, las fuerzas de seguridad del Estado y los paramilitares que se han aliado claramente con estos últimos. Los paramilitares, a los que se les atribuye una gran proximidad a los latifundistas, son los responsables principales de la subida del número de las violaciones graves de los derechos humanos en el año 1999. Una y otra vez, muchas personas fueron torturadas y mutiladas por fuerzas paramilitares antes de que los asesinaran. La guerrilla aterroriza a la población civil, y el Estado, que debe ocuparse de mantener el orden, no ha logrado controlar las acciones de estos grupos. Todos los bandos de a guerra son responsables de os secuestros, la torturas y los actos terroristas, siendo siempre los civiles desarmados los mas afectados.
A esto se suma que la mayoría de las plantaciones de coca están en áreas que se encuentran bajo el control de grupos guerrilleros lo que hace que las drogas florezcan en territorios sin leyes. Casi la mitad de los cultivos de coca se encuentran en el departamento de Putumayo, al sur, que están controladas en parte por las FARC y en parte por los paramilitares.
Las FARC, lideradas por Manuel Marulanda, “Tiro Fijo” y Jacobo Arenas hicieron su aparición en 1964, cuando un grupo pequeño se levantó en armas en Marquetalia, combinan la terquedad campesina con un cerrado dogmatismo. Las FARC aún proclaman ser comunistas, pero ahora mezclan el comunismo con el “bolivarismo”. Las FARC, la mayor y más solida guerrilla de Colombia, se volvió más fuerte desde el año 1982. Hoy tiene un enorme encumbramiento militar convirtiéndose en una fuerza armada muy poderosa. Su enorme capacidad de movilización les permite mantener a más de trescientos civiles y militares secuestrados e incluso transportarlos de un lado al otro del territorio.
A pesar de demostrar interés en el proceso de paz, las FARC no entregaran sus armas hasta que no cambie la estructura social del país a una en que las riquezas estén mejor distribuidas. Proponen un nuevo sistema democrático para Colombia con justicia social y autodeterminación nacional. Su objetivo principal es la conquista y el mantenimiento del poder.
§  El Presidente Álvaro Uribe Vélez inicio su mandato con tres metas claras y entrelazadas:
§  Campaña por las reformas políticas: combatir la corrupción y hacer más operativa la maquinaria institucional y administrativa.
§  Proyecto de Seguridad Democrática: buscar la negociación con los grupos insurgentes desde la presión.
§  Despliegue externo: introducir el conflicto colombiano en la agenda internacional.
Ante esta política de “mano dura” de Uribe, los grupos insurgentes se han preparado para la polarización del conflicto: las FARC con su demostración de fuerza tratando de extender el conflicto a varios frentes y de acercar la escalada ofensiva a las ciudades, y el ELN intentando sobrevivir en un contexto de tensión en el que deben confrontar tanto a las Fuerzas Armadas como a las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC). Estas últimas, amparadas por las complicidades políticas y por compartir objetivos con las Fuerza Armadas, buscan llegar a un acuerdo con el gobierno siempre y cuando sus acciones del pasado le sean perdonadas.
Tras 40 años de conflicto, ni el Estado ni los grupos armados han conseguido sus objetivos y la violencia ha llevado a la transformación del sistema económico del país y a la militarización de la sociedad con los grupos paramilitares como nuevos actores. Un elemento importante es que la sociedad civil colombiana, la principal víctima del conflicto armado, se está involucrando activamente en el Proceso de Paz con propuestas esperanzadoras que buscan el final de la violencia y que crean una dinámica que podría ser germen de integración social en la que la convivencia se imponga a la confrontación y a la violencia. 









Biliografia
http://es.wikipedia.org/wiki/Conflicto_armado_interno_en_Colombia#Antecedentes
http://es.wikipedia.org/wiki/Conflicto_patricio-plebeyo
·         ARELLANO, N. Provención del conflicto y la formación del educando. Disponible en:www.monografias.com/trabajos28/provencion-conflicto/provencion-conflicto.shtml
·         CASCÓN, P. Educar en y para el Conflicto. Disponible en: pacoc.pangea.org/documentos/
·         CASCÓN, P. Provención. Disponible en: pacoc.pangea.org/documentos/
·         CASCÓN, P. Esquema de herramientas para abordar conflictos. Disponible en: pacoc.pangea.org/documentos/
·         CASCÓN, P. Actitudes ante los conflictos: esquema y encuesta. Disponible en: pacoc.pangea.org/documentos/
·         Diccionario de Conflictología. Disponible en: www.crars.org.br/.../Diccionario%20de%20Conflictologia.doc
·         EZEQUIEL, E; GONZÁLEZ, E; PEÑA, D; RODRÍGUEZ, C. Explorando la presencia de los estilos de manejo de conflicto en jóvenes de nivel secundaria. Disponible en: www.monografias.com/trabajos59/conflictos-en-jovenes/conflictos-en-jovenes2.shtml
·         GROOM, A.R.J. Teoría de resolución de conflictos. Disponible en:www.chasque.net/frontpage/relacion/anteriores/9611/16.htm
·         GUZMAN, V.M. El reconocimiento como transformación de conflictos. Disponible en: www.inter-mediacion.com/martinezguzman.htm
·         LÉDERACH, J.P. Análisis del conflicto. Disponible en: www.scribd.com/doc/7244000/El-Analisis-Del-Conflicto-Lederach
·         LÉDERACH, J.P. Conflict Transformation. Disponible en: www.beyondintractability.org/essay/transformation/
·         PASTOR, X. ET AL. Mediació Comunitària i Gestió Alternativa de Conflictes a Catalunya. Una guia per la Governabilitat. Disponible en: [1]
·         TORRECILLA, J.M. Manual de formación de mediadores sociales. Disponible en:www.munimadrid.es/.../Salud/Publicaciones/.../formacionmediadoressoc.pdf
GALVIS, Padilla Alirio y otros, Percepción Comunitaria en el Manejo del Conflicto Policial, Colombia



LA TEORIA DEL CONFLICTO SOCIAL Y LA TEORIA GENERAL DEL DERECHO


Debemos empezar diciendo que el hombre es un ZOON POLITIKON[1]. Es decir un animal político por naturaleza, según Aristóteles en su libro La Política nos trata de explicar que efectivamente los seres humanos somos sociales por naturaleza, somos seres que necesitamos del otro para poder sobrevivir, así como el hombre tiene la necesidad de comer, beber o vestir de igual modo tiene la necesidad de convivir, de relacionarse con otro u otros seres humanos.  El hombre es el animal más social que existe entre los animales gregarios no solo por su raciocinio sino también por su capacidad de decisión. Aristóteles advertía: ”Lo propio del hombre con respecto a los demás animales es que el solo tiene la percepción de lo bueno y lo malo, de lo justo de lo injusto, de otras cualidades semejantes, y la participación común en estas percepciones es lo que constituye, la familia y la ciudad”.[2] Este es el primer paso de la filosofía hacia la ética y la moral el hombre es un ser animal, político, racional, discerniente, moral y además ético. Pero insiste Aristóteles en mostrar al ser humano tan animalmente político que esgrime “El que sea incapaz de entrar en esta participación común,  o que a causa de su propio suficiencia, no necesite de ella, no es mas parte de la ciudad, sino una bestia o un dios”[3].  
A pesar de que el hombre es naturalmente  social, este no es armonioso por el simple hecho de ser social, necesariamente sus relaciones interpersonales derivan conflictos; conflictos internos y externos, conflictos internos tales como la incertidumbre moral. El mundo en su naturaleza surge en medio del Caos y el hombre no es otra cosa que el producto de un inmenso caos, por lo tanto no es atrevido decir que el caos y el conflicto hacen parte del hombre. El hombre es socialmente conflictivo, en el debate de las ideas siempre una idea se querrá imponer sobre la otra que tiene mayor  aceptación y es entonces cuando las pasiones del ser se desbordan y terminan dañando el otro,    porque la necesidades del hombre no solo se basa en la supervivencia sino en la aceptación del grupo donde convive, al hacerse escasos los elementos unos pugnan por proveerse en la mayor posibilidad asi este tenga que desechar las virtudes de su contendiente. A mayor relaciones sociales mayor relación de conflictos. 
 El termino conflicto proviene del latin, su prefijo con significa (Convergencia, Union), y flicto es el prefijo que proviene de la raiz fligere, que significa, daño, dolor, infligir, luego en el análisis exegético de la palabra podríamos decir que conflicto es el daño que se produce de la unión de dañar o infligir un daño, esto significa que desde su principio el conflicto se toma como una situación de carácter meramente social. La antítesis del conflicto es la paz, la armonía, pero si pensamos a fondo si lo natural es el conflicto la paz vendría siendo el anhelo que más allá de ser natural más bien se perfila como una utopía. Generalmente las necesidades del hombre son más grandes que la satisfacción de las mismas[4],  sin embargo el hombre siempre está en la constante búsqueda y en medio de ella encontró el derecho para tratar de buscar la utopía tan anhelada llamada paz, tratar de bloquear esas pasiones desbordadas de los seres y de igual manera refrenar el desbocado conflicto de las relaciones interpersonales. El derecho no es otra cosa que una consecuencia social que se concibe según el contexto histórico en el que se vive, pero es la forma de armonizar el caos imperante de la vida por eso el derecho y todas sus teorías planteadas es infaliblemente social, Del Vechio manifestaba lo siguiente:  ”No se concibe sociedad sin derecho, ni un derecho sin una sociedad humana”[5].  A pesar de que el derecho es una excelente forma de regular la armonía entre los hombres esta no es suficiente para apaciguar el conflicto social, Emilio Dhurkeim precursor de la sociología de origen francés, discípulo de Augusto Comte, exponente del modernismo,  planteo que la forma más fácil de erradicar el conflicto era a través de la organización del estado  es decir que en la medida en que se fortalecieran las autoridades de control  de manera jerárquica y organizada el conflicto social poco a poco desaparecería, este modelo por muchos años fue implementado pero solo funciono hasta la revolución francesa puesto que los burgueses cansados de la represión y excesos del poder por parte de los órganos de control confrontaron la monarquía al punto de ahorcar al rey y establecer la república, situación tal que derivó en un nuevo conflicto.
Cuando se controvierte a Durkheim se llega a la conclusión de que efectivamente es una forma de pensamiento excesivamente conservadora pues el orden no necesariamente asegura la desaparición del conflicto porque sencillamente los seres humanos somos inconformes y nos decepcionamos fácilmente porque una virtud del ser es que en medio del reconocimiento de su perfección este siempre busca el perfeccionamiento hacia la divinidad o el reconocimiento de los suyos ya sea como el ser más abominable o el de mayor resplandor egocéntrico. Robert Nisbet (1988) diferencia en Durkheim un conservadurismo en sus principios sociológicos fundamentales que difiere y contrasta con su progresismo ideológico y en alineamientos políticos. Opina que sus “predilecciones político-morales” no se emparentaban con las ideas de un conservador; pero su sociología ve, como todos los conservadores, en el “conflicto interior, político y económico” un indicador de crisis moral (p. 221).

Las estructuras de organización cambian según las tendencias sociales, y en las tendencias sociales siempre unos tienen mucho y otros tienen poco, por lo tanto las sociedades se conforman en clases, Karl Marx planteaba lo siguiente en su análisis de la teoría de los conflictos­: “...no me cabe el mérito de haber descubierto la existencia de las clases en la sociedad moderna ni la lucha entre ellas. Mucho antes que yo, algunos historiadores burgueses habían expuesto ya el desarrollo histórico de esta lucha de clases y algunos economistas burgueses la anatomía económica de éstas. Lo que yo he aportado de nuevo ha sido demostrar: 1) que la existencia de las clases sólo va unida a determinadas fases históricas de desarrollo de la producción; 2) que la lucha de clases conduce, necesariamente, a la dictadura del proletariado; 3) que esta misma dictadura no es de por sí más que el tránsito hacia la abolición de todas las clases y hacia una sociedad sin clases...”  Las luchas de clases son una realidad social, sin embargo Marx plantea que solo haciendo una distribución igualitaria de las utilidades del estado cesaran los conflictos y el mundo será mucho más equilibrado. Situación está que no es cierta porque el hombre repito fácilmente vive insatisfecho y al ser igual que los demás en su patrimonio y trato buscara la forma de marcar la diferencia, la igualdad no siempre es sinónimo de paz es tan solo un elemento, además la igualdad se puede dar solo entre iguales. Pues así la doctrina jurídica no lo enseña, cuando la misma norma jurídica otorga más poderes a uno frente a otros para equilibrar la balanza.  Los sociólogos y economistas modernos como John Nash


[1] La Política de Aristóteles, Ed. Panamericana, 1999, pag. 12
[2] Ibidem
[3] Ibidem
[5]. Giorgio del Vechio, Sulla statualita del diritto, Milano, Giuffre Editore, 1958, num X, Pag. 28.